La gestión que está llevando a cabo el actual equipo de Gobierno, encabezado por la alcaldesa socialista Noelia Merino, que cuenta con el apoyo explícito de la concejala tránsfuga Isabel González, se ha materializado con una subida de impuestos «brutal» en las principales tasas que soportan los vecinos, como el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y la tasa de residuos vegetales que se incrementará en torno a un 20%, así como la nueva tasa creada por el Ayuntamiento de depuración de aguas.
Unas subidas que para los populares tienen un «afán recaudatorio y que buscan ‘tapar’ la lamentable gestión que está haciendo el Consistorio, falto de ideas, de propuestas, de proyectos y de financiación y que solo utiliza la fórmula de ‘sangrar’ a los vecinos con una subida que supondrá entre 100 y 150 euros para las familias del municipio a las que se va a hacer mucho daño”, ha recordado el portavoz Popular, Antonio Luis Rodríguez.
Un descontento que ha rebelado a los vecinos, «hartos de contar con unos servicios básicos deficientes y cada vez de peor calidad» y que se ha plasmado en una recogida de firmar para protestar contra esta medida recaudatoria “absolutamente abusiva y desproporcionada”.
Una iniciativa popular que ha partido de la asociación de la urbanización Oasis Golf en la que se han involucrado una veintena de personas y que está teniendo un gran calado entre los vecinos «como modo de protesta y de presión para denunciar un modelo de gestión contrario a los intereses de los vecinos». A día de hoy, este grupo ya ha recogido más de 300 firmas y esperan llegar hasta las 500 en un municipio que cuenta con una población de en torno a 1.200 personas.
El portavoz del PP ha subrayado que “desde el Grupo Popular apoyamos absolutamente esta protesta y la recogida de firmas para denunciar el castigo que la alcaldesa y su equipo de Gobierno, junto a la concejala no adscrita que, con su abstención en el pleno, permitió la aprobación de esta brutal subida de impuestos”.
Además, los vecinos de Carrascal de Barregas se están planteando articular otras medidas de protesta para denunciar la carga impositiva que ha aprobado el Grupo Socialista.
Debo decir que los vecinos hemos sido sorprendidos al utilizarse políticamente una protesta vecinal, en el intento de denigrar la actual gestión del Ayuntamiento. Resulta indignante que se pretenda capitalizar este reclamo en beneficio del Partido Popular, responsable de la gestión precedente en la cual, habiendo recibido una economía saneada, se contrajo una deuda excesiva que ahora impide una labor más amplia.
Como siempre, el Partido Popular haciendose el protagonista de algo que no le compete. De los motivos que han llevado al Ayuntamiento a tomar esa decisión, de eso, no se pronuncian.
Piscina Municipal con problemas, presupuesto de fiestas excesivo, deudas con proveedores…