Los empleados púbicos se han concentrado a la puerta de la subdelegación del Gobierrno para protestar y exigir una mejora en las condiciones de los empleados públicos y en la calidad de los servicios que se ofrece a los ciudadanos. Estas medidas se plasman en la petición al Gobierno de una subida salarial y de la recuperación del poder adquisitivo perdido; más oferta de empleo público en todos los sectores y administraciones; o mejores condiciones laborales, por ejemplo, para poder realizar teletrabajo, ya que es una de las medidas que el Gobierno quiere impulsar en el nuevo plan de ahorro energético.
La protesta ha sido convocada por la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), que ha recordado «las sobradas muestras de compromiso y sacrificio en los últimos años. Durante la pandemia hemos dado todo y más para que este país saliera a flote; y trabajamos a diario para ofrecer un servicio público de calidad, con muchas dificultades y limitaciones, en la Sanidad, la Educación, la Justicia, los servicios de empleo o la Seguridad Social”.
Desde CSIF indican que se ha perdido un 15% del poder adquisitivo, desde que en 2010, “por primera vez, se nos bajó el sueldo. Llevamos más de 11 años aportando al pacto de rentas con nuestras nóminas devaluadas, hoy más aún con una inflación brutal en los precios de la energía, el combustible o la cesta de la compra”. Además, «los bajos sueldos están provocando que miles de puestos queden vacantes en las administraciones públicas, en la sanidad en la educación, como ha reconocido el propio Gobierno».
El presidente de CSIF Castilla y León, Benjamín Castro, ha avisado de que «nadie dude de que CSIF volverá a salir a las calles de nuestra Comunidad, con nuevas movilizaciones, para defender los derechos del conjunto de empleados, si el Gobierno persiste en mantener a sus trabajadores en condiciones de empobrecimiento, y no adopta medidas inmediatas que dignifiquen su labor».