Las obras para conectar Santa Marta a la red de agua de Salamanca ya han comenzado para dar la solución definitiva al problema histórico que sufren los vecinos de turbidez y calidad del agua.
El alcalde de Santa Marta de Tormes, David Mingo, acompañado por la concejala de Fomento, Marta Labrador, ha presentado esta mañana el inicio de estos trabajos de conexión de la red de suministro de agua con Salamanca: «Esta es una iniciativa tan valiente como necesaria que llevamos mucho tiempo persiguiendo y que ha sido posible por la gestión política que nos ha permitido desarrollar este proyecto”, que será una realidad en ocho meses que es el plazo máximo de ejecución, por lo que el primer edil confía en que sea una realidad antes del próximo verano.
Las obras, que incluyen el soterramiento de 3 kilómetros de tuberías y suponen una inversión de 1.135.000 euros, se han llevado a cabo gracias a un convenio a cuatro bandas de Santa Marta de Tormes con el Ayuntamiento de Salamanca, la Junta de Castilla y León a través del Somacyl (Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León) y la Diputación de Salamanca que, a través de una subvención nominativa, sufragará una parte importante del proyecto.
La mejora de la calidad del agua conllevará un incremento de la tasa que los vecinos deberán pagar por el servicio acorde a la tarifa establecida por el Ayuntamiento de Salamanca en su ordenanza. En este sentido, Mingo ha reconocido que la tasa sufrirá la subida correspondiente al mejorar la potabilización del agua, pero también ha querido remarcar la buena noticia que supone “dar por cumplida esa eterna promesa que nos va a permitir tener la misma agua que Salamanca. A pesar de ser un problema histórico de Santa Marta muy complejo, parece la opción más lógica si tenemos en cuenta que tenemos una potabilizadora a escasos metros de nuestro término municipal”.
Gracias a esta colaboración entre administraciones, la impulsión del agua potable llegará desde la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de La Aldehuela hasta el depósito regulador de Santa Marta. Para ello habrá que realizar la conducción desde la margen derecha del río Tormes hasta la calle Río Ubierna (un trazado de unos 3.252 metros) y adaptar la estación de bombeo con diferentes actuaciones.
El inicio de las obras se ha materializado tras la firma de un convenio de cooperación entre el Somacyl y los ayuntamientos de Salamanca y Santa Marta, último de los trámites previstos para llegar a la ansiada conexión que permitirá a la ciudadanía contar con un sistema de abastecimiento de agua potable de calidad.
Previamente, los responsables municipales han ido cerrando todos los pasos del proceso que comenzó con la firma del acuerdo con el Ayuntamiento de Salamanca y la posterior incorporación de Santa Marta a la Comunidad de Usuarios del Azud de Villagonzalo, además de la aprobación de la inversión por parte de la Diputación y el Somacyl.
Según el último convenio firmado, del 1,1 millones, el Somacyl se hará cargo del 40% de la inversión (454.173€), mientras que el Ayuntamiento de Santa Marta tendrá que afrontar el 60% restante (113.000€), un importante presupuesto que el Consistorio sufragará en parte gracias a una subvención nominativa de la Diputación de Salamanca que supone un 50% (567.827 euros) del proyecto global.
Hasta ahora, Santa Marta utilizaba dos medios de captación de agua para prestar el servicio de abastecimiento a los vecinos. Por un lado, la toma principal se hacía desde el Canal de Villagonzalo, que tiene limitada la captación a los Hm3 sin posibilidades de poder aumentarla, como solicitó en su día el Ayuntamiento, siendo denegada la petición por la Confederación Hidrográfica del Duero.
Por otro lado, la toma secundaria se hacía directamente desde el río, aguas abajo del azud de Villagonzalo, en un punto en el que el agua ya ha pasado por diferentes zonas urbanas, de actividad agrícola y afluentes y escorrentías, lo que provocaba un estado pésimo de la calidad del agua.
Los problemas de captación se suman a la antigüedad y a la poca capacidad de la ETAP, que se construyó hace más de 40 años y que es totalmente insuficiente para garantizar el suministro en situaciones de gran afluencia de agua provocadas por la lluvia o por la apertura del embalse de Santa Teresa. En concreto, la captación sobre el río Tormes es una obra del año 1987, mientras que la Estación de Tratamiento de Agua Potable, es la resultante de una original ejecutada en 1983 y una ampliación del año 1996.
Actuaciones realizadas para mejorar el servicio
En los últimos 5 años, el Ayuntamiento de Santa Marta ha realizado 14 inversiones fundamentales para actualizar la capacidad de trabajo, el tratamiento y la seguridad sanitara de la potabilizadora, actuaciones de gran calado que suponen una inversión aproximada de 350.000 euros, a pesar de los cuales no ha sido posible mejorar la turbidez, el olor y el sabor del agua. Por este motivo, la conexión con la red de suministro de agua con Salamanca se planteó como la única alternativa viable para dar solución a los problemas que Santa Marta lleva arrastrando desde hace décadas.





