Santa Marta contará con dos nuevas Acciones de Formación y Empleo (AFE) este año, ‘Recreatio’ y ‘Caering Social’, que se pondrán en marcha a partir del próximo mes de marzo y que se centrarán en el turismo, la horticultura y la labor social como base formativa para impulsar la inserción laboral de veinte desempleados del municipio que participarán en estos programas formativos durante nueve meses.
La Junta de Castilla y León, a través del Servicio Público de Empleo (Ecyl), ha dado luz verde a las dos nuevas AFE: ‘Recreatio’ y ‘Catering Social’. que se pondrán en marcha este año en Santa Marta con una inversión total de 521.352 euros, de los que el Ecyl sufragará 417.777 euros, mientras que el Ayuntamiento de Santa Marta se hará cargo de los 103.574 restantes. “Una inversión muy importante que está a la altura de los objetivos que perseguimos que, principalmente se dirigen a construir un futuro laboral para los 20 participantes, pero también seguir ampliando nuestros recursos turísticos y continuar con las acciones para mejorar la calidad de vida de las personas vulnerables”, ha explicado el alcalde de Santa Marta, David Mingo.
‘Recreatio’ es la AFE que comenzará el 1 de marzo y que se centrará en el turismo y en la horticultura a través de la recreación de un huerto medieval en una parcela municipal ubicada en La Fontana de 1.619 metros cuadrados . Un programa que supone una inversión total de 299.754 euros y cuyo objetivo fundamental es crear nuevos productos turísticos en Santa Marta, para lo que se ha hecho un estudio previo acerca de los orígenes del municipio, ligado a la época de repoblación de Salamanca.
Esta investigación ha sacado a la luz la existencia de un antiguo convento de finales del siglo XII, contemporáneo a la iglesia románica y la aceña, al que ambas construcciones podrían pertenecer, y que pudo ser la semilla de lo que hoy es Santa Marta. Este convento denominado de Santa María de la Serna o la Serna del Vado, estuvo ubicado en lo que hoy es Santa Marta de Tormes aunque se desconoce el emplazamiento exacto. El convento vivió muchas vicisitudes, desde riada e incendios, hasta escisiones y traslado, hasta que terminó por desaparecer. Pero la orden primigenia, a día de hoy, sigue manteniendo su convento en la capital de León, teniendo documentada su historia.
Dada la relevancia que el convento pudo tener en Santa Marta y como una apuesta más por el desarrollo cultural y turístico del municipio, los alumnos del nuevo programa crearán un nuevo espacio expositivo permanente en un edificio municipal en desuso ubicado en la zona de La Fontana.
El espacio interior se denominará ‘Conventus Hortus’ y contará con diferentes salas y talleres donde, mediante diversos elementos y herramientas expositivas, se repasará el origen, la organización interna, la evolución, las reglas y las reformas de aquellos conventos de repoblación establecidos en territorios de frontera, además de las diferentes reglas u órdenes existentes, tipologías, expansión, desarrollo y posterior declive. Existirá un apartado específico para el convento de Santa Marta en el que se explicará cómo se ha llegado conocer su existencia, cómo se desarrolló y cómo continuará la labor de investigación.
En cuanto al huerto, se harán cuatro parcelas tal y como podía haber sido durante la Edad Media, realizando una investigación y análisis exhaustivo desde aspectos de la botánica y la arqueobiología de la época. Se trabajará la definición de las parcelas, la implantación del cultivo, la conservación de plantas, el mantenimiento, el control de plagas, enfermedades y fisiopatías.
Los huertos en la Edad Media fueron jardines de dimensiones modestas que se podían encontrar dentro de los muros de monasterios, conventos o castillos. Su finalidad era doble: disfrute estético y utilidad práctica. Por tanto, se producían tanto flores como hortalizas, verduras, frutas y plantas medicinales para la botica medieval, plantas aromáticas y especias.
En este sentido, el alcalde santamartino ha destacado la importancia de este programa: “Creo que las aportaciones de esta nueva Acción de Formación y Empleo serán inmensas para Santa Marta, tanto desde el punto de vista cultural, religioso y turístico, como desde el educacional o formativo. Un proyecto que no me cabe duda que incrementará el número de visitas a nuestro municipio, ya que no existe ningún producto turístico similar en nuestro entorno”.
La segunda Acción de Formación y Empleo que comienza el 15 de marzo llega a Santa Marta bajo el título de ‘Catering Social’ y se realizará en las instalaciones de la Escuela Municipal de Hostelería con un presupuesto total de 221.598 euros. Se establecerá de lunes a viernes, en horario de comidas y se dirigirá fundamentalmente al colectivo de mayores y personas con dificultades de movilidad y carencias alimenticias, canalizados a través de los Servicios Sociales del municipio, para un número aproximado de 25 usuarios al día.
Los alumnos elaborarán diariamente un menú completo compuesto por un primer plato, un segundo, postre, pan y agua mineral, siguiendo los criterios de los certificados de profesionalidad correspondientes. En las elaboraciones diarias se utilizarán productos frescos, de calidad, vinculados al territorio y adquiridos preferentemente en los pequeños establecimientos de la localidad, con la finalidad de generar valor y fijar población. Los usuarios contarán con este servicio de catering a domicilio y también podrán recoger el menú en la propia escuela.
A lo largo de esta AFE se realizarán también otras actividades complementarias abiertas a la población en general, como taller de desayunos saludables para niños en colaboración con los colegios de Santa Marta de Tormes, las jornadas micológicas y la colaboración en la preparación y servicio de bebida el día de la festividad de la Patrona.
Se trata de un programa que, como ha insistido David Mingo, “es muy similar al que pusimos en marcha en 2023 y con el que logramos generar un gran beneficio social en Santa Marta, prestando un servicio básico a la población más vulnerable, que no siempre tiene acceso a la cobertura de sus necesidades básicas”.