Santa Marta ha puesto el broche a las actividades del Día Mundial del Medio Ambiente que se han celebrado durante toda la semana con una iniciativa improvisada en el último momento. El cielo gris y cubierto y la constante amenaza de tormenta ha oblidado, por prudencia, a suspender la ruta cicloturística programada. En su lugar el Ayuntamiento ha programado una yincana con diferentes juegos y pruebas de habilidad, destreza y orientación que se ha llevado a cabo en la Isla del Soto.
Una veintena de personas han participado en estas actividades para despedir de forma lúdica un programa que ha contado con seis jornadas dirigidas a la formación y la educación de todos los sectores de población para cuidar y respectar el medio ambiente y fomentando los hábitos de reciclaje y recogida de residuos.