El portavoz del Grupo Socialista en la Diputación de Salamanca, Fernando Rubio, ha puesto en duda la efectividad de la medida anunciada por el presidente de la Diputación, Javier Iglesias, para solucionar los problemas en el suministro de agua potable a los municipios de la Mancomunidad de Cabeza de Horno y Ledesma.
El portavoz socialista, Fernando Rubio, ha calificado esta inversión de aproximadamente 400.000 euros como una medida «que llega tarde, mal, es poco ambiciosa y escasa, y solo un parche que no soluciona definitivamente esta cuestión». Rubio ha recordado que este problema no viene por los cambios en la reglamentación de niveles o criterios sanitarios en la calidad del agua como ha querido hacer ver el presidente Iglesias, sino por el exceso de uso de plaguicidas y pesticidas, algo que no se viene controlando por la Diputación y que «por muchos filtros que se pongan es muy probables que siga llegando agua contaminada a los grifos si no se ejerce un control o si desde la Junta o la Diputación no asumen sus responsabilidades».
