Alfonso Fernández, presidente de la Junta de Castilla y León, y Juan García-Gallardo, vicepresidente de la institución regional, junto al consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández, ha presentado el Proyecto de Presupuestos de la Comunidad para 2024, el más elevado de la historia autonómica.
Las cuentas para el próximo ejercicio alcanzan los 14.562 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 5,45 % respecto a las de 2023 y aumentan las inversiones reales en todas las provincias. Además, tienen como objetivo garantizar la equidad y la calidad de los servicios públicos de la Comunidad, proteger y atender a las personas, impulsar la economía para generar nuevas oportunidades de futuro, el desarrollo rural y la sostenibilidad demográfica como bases de la cohesión social y territorial.
Las cuentas de 2024 son eminentemente sociales. Así, más de 9.500 millones, es decir el 81,73 % del presupuesto de las consejerías, están orientados a políticas de este tipo. Esto supone que 8 de cada 10 euros se dedican a gasto social. Aumentan un 2,7 % los recursos para Sanidad; un 4,6 % para Educación; y un 8,3 % para Servicios Sociales.
Estos Presupuestos están enfocados, por tanto, a la consolidación de la posición de liderazgo en la sanidad, la educación, el transporte, la atención a mayores y personas dependientes, a través de los profesionales de la Comunidad e impulsando servicios de nueva generación. Con ellos, se pretende asegurar un futuro mejor a las personas con las mejores condiciones de salud y empleo, el aprovechamiento del entorno natural y con un apoyo expreso a las familias para que decidan residir en Castilla y León.
Entre otros aspectos, destacan los más de 1.500 millones de euros destinados a la Agricultura y la Ganadería, lo que supone un 11 % del presupuesto. De esta forma, el Gobierno autonómico demuestra una vez más su compromiso con este sector estratégico para la Comunidad.
Además, todas las medidas incluidas en este presupuesto son posibles gracias a una fiscalidad moderada, inteligente y selectiva; que incentiva el consumo y la inversión, favorece el crecimiento económico y la creación de empleo.
Se trata de la cuarta rebaja fiscal autonómica desde 2021, la tercera en esta Legislatura, con 674 millones de euros en beneficios fiscales para ayudar a empresas y familias, con incentivos ficales para 480.000 contribuyentes y más de 1 millón de beneficiarios por el mantenimiento de la rebaja de la tarifa autonómica del IRPF.
Se plantea una fiscalidad especialmente favorable para el mundo rural con nuevas medidas como el incremento de la deducción en el IRPF por natalidad para nacimientos en el medio rural, la extensión de la bonificación del 100% en transmisiones patrimoniales por el arrendamiento de fincas rústicas, la congelación o supresión de tasas y precios públicos, y una nueva bonificación del 50% en el impuesto de actos jurídicos documentados.