El ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, ha sido el encargado de inaugurar una de las infraestructuras más esperadas de la provincia de Salamanca, el cuartel de la Guardia Civil de Santa Marta.
Una puesta de largo en la que ha estado acompañado por el alcalde del municipio, David Mingo, el director general de la Guardia Civil, Leonardo Marcos, la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, la directora del SIEPSE, Mercedes Gallizo, o el teniente Coronel Jefe de la Comandancia de Salamanca, Pedro Merino.
Un acto en el que la presidenta del SIEPSE ha sido la primera en tomar la palabra para explicar las características de nuevo edificio que comenzó a gestarse con la aprobación en el año 2019 del nuevo Plan de Infraestructuras de la Seguridad del Estado que engloba una partida total de unos 600 millones de euros, a los que se han sumado 400 millones más de los fondos europeos y que han culminado en Santa Marta con un edificio con todas las medidas de eficiencia energética y sostenibilidad.
El alcalde de Santa Marta, David Mingo, ha querido recordar la importancia del Ayuntamiento para conseguir lo que hoy es una realidad, la inauguración del nuevo cuartel. Un proceso que arrancó en 2008, siendo él mismo concejal de Urbanismo, con la cesión de la parcela municipal. Mingo ha querido «dar las gracias a todas las corporaciones, a todos los diputados y senadores nacionales, a todos los ministros y a todos los jefes del puesto de mando de la Guardia Civil que, durante 15 años, han empujado para conseguir que lleguemos hasta aquí». Mingo ha finalizado su intervención pidiendo al ministro «poner la guinda al pastel con la construcción de las viviendas de los Guardias Civiles que estaban recogidas en el proyecto».
El ministro Grande-Marlaska ha recogido el guante lanzado por el primer edil de Santa Marta y se ha comprometido a finalizar «con esa guinda que supondrá la construcción de los pabellones para los miembros de la Guardia Civil a los que has hecho referencia». El ministro del Interior ha agradecido y puesto en valor «la cooperación entre instituciones para dotar a la Benemérita de infraestructuras para poder realizar de la mejor forma posible su trabajo y atención a los ciudadanos».
Un cuartel en el trabajarán 59 hombres y mujeres para conseguir la seguridad «como pilar básico de los valores democráticos y poder afrontar los desafíos de una delincuencia cada vez más especializada y con unidades para combatir la violencia de género, delitos contra el menor o la cibercriminalidad».
El acto ha finalizado con un vino de honor en el que los asistentes han brindado por la puesta de largo del nuevo edificio.
Los datos del nuevo edificio
El nuevo cuartel de la Guardia Civil seguirá dando servicio a 20 municipios de la provincia y 5 pedanías en una extensión que abarca 450 kilómetros cuadrados.
El edificio consta de tres plantas y un sótano, con una superficie construida de 863 metros sobre una parcela de más de 2.400 metros. Además, cuenta con los correspondientes espacios de oficinas, atención al público y zona de seguridad, con celdas y dependencias asociadas, y dos viviendas para mandos, así como una zona de aparcamiento con capacidad para 21 vehículos.