La permuta por una parcela municipal es el acuerdo al que ha llegado el Ayuntamiento con los propietarios del terreno anexo, que permitirá incorporar la mayor parte (el 65%) y la nave existente de 220 metros cuadrados para ampliar el recinto de baño y que los vecinos puedan disfrutan cómodamente de las instalaciones el próximo verano.
La Corporación municipal de Doñinos ha aprobado por unanimidad en el último pleno del año el convenio urbanístico firmado con los propietarios de la parcela anexa a las piscinas para la ampliación del recinto de baño estival.
Un acuerdo por el que el Ayuntamiento permuta una parcela municipal de unos 2.000 metros por el terreno anexo a la piscina, de 1.600 metros cuadrados, que permitirá duplicar el recinto tras eliminar la pantalla verde existente para ampliar la llamada zona de ‘playa’ y césped y solucionar el problema de espacio que sufre el municipio cada verano dado el crecimiento de población y el aumento del volumen de usuarios que utilizan a diario las instalaciones cada temporada.
Una solución que dará cobertura a las necesidades actuales y durante un periodo de tiempo “bastante grande, dado que ahora es inviable acometer un proyecto de construcción de las nuevas piscinas municipales”, ha señalado el alcalde, Agustín Rodríguez.
En este sentido, la portavoz socialista, Aroa Izquierdo, ha reconocido que ésta es la opción más viable para solucionar el problema de aforo que necesita la piscina y ha recordado que “hace diez años el Grupo Socialista llevaba el proyecto para haber ejecutado unas nuevas piscinas, pero como se ha fundido el remanente, no hay otra manera de darle solución”.
Otro de los puntos que también han contado con el apoyo de todos los grupos en la sesión celebrada anoche es la solicitud del edil no adscrito Celestino del Teso, de considerar la revisión a la baja del porcentaje del IBI e iniciar el procedimiento para su estudio y aplicación, tras confirmarse que la normativa europea no supone la obligatoriedad en los términos aplicados por el Gobierno de España respecto a la tasa de recogida de residuos. Según esta consideración, el IBI pasaría al 0,41 (un 0,083 menos) y esta rebaja supondría unos 40.000 euros para las arcas municipales, según el cálculo estimado, “además de preservar la autonomía legislativa de las administraciones locales y no penalizar a los ciudadanos”.
Acusación de presunta prevaricación de un edil
El momento más tenso del debate se produjo en las informaciones de Alcaldía, cuando el primer edil acusó de “presunta prevaricación, malversación y presunto tráfico de influencias” al concejal no adscrito, ex edil del anterior equipo de Gobierno de Cs, José Carlos Pérez, por haber registrado una factura al Ayuntamiento por importe de 975 euros por la venta de un equipo de megafonía.
Rodríguez le calificó de “cara dura por aprovecharse de su condición de concejal y facturar al Ayuntamiento a través del Club Deportivo, cuando es una entidad sabe que se financia con la subvención municipal y usted, además de concejal, forma parte de la junta directiva del mismo”.
Tensión en la que el alcalde le pidió que “debería irse por intentar lucrarse”, a lo que el concejal acusado reconoció haberse equivocado. “Me he equivocado, lo reconozco, pero lo hice como un favor y en ningún momento me he lucrado ni me he reído de los vecinos de Doñinos”, afirmó Pérez.
Asimismo, el pleno aprobó también por mayoría las actas de sesiones anteriores y la reconfiguración de los órganos municipales tras la disolución de los grupos políticos Cs y Vox y pasar sus concejales a la condición de no adscritos, para el reparto proporcional de la participación en comisiones y plenos. En este sentido, todos los grupos apoyaron que Manuel Hernández y Celestino del Teso sigan actuando como portavoces.
