San Esteban de la Sierra se ha volcado en la presentación de la octava edición del belén serrano confeccionado por Tomás Gómez, que ha querido dedicar a la agricultura y la ganadería. El belén serrano, que ya es todo un reclamo turístico en el municipio, cuenta con más de 500 figuras y en torno a 20 construcciones distribuidas en los 40 m2 de superficie con paisajes inspirados en el entorno del pueblo.
En esta nueva edición, Tomás Gómez ha querido dedicar el belén de manera especial a Antonio Márquez como representante de los agricultores, que ha sido el encargado de abrir la puerta, como es tradición, en la que se encuentra el belén. Enfocado en los últimos años en el cultivo de la almendra, «es el espejo en el que pueden mirarse los que vienen por detrás, ya que es un ejemplo de la innovación en la agricultura», ha comentado Gómez.
Al belén de San Esteban de la Sierra no le falta ni un detalle y cada año sigue incorporando nuevas figuras y nuevas escenas muchas de ellas con nombre propio, como la fragua dedicada a Mari Mar y Emiliano de Forjas Pacheco, la venta de embutidos a Javi Labrador o la escenas en la que aparece el torero Marco Pérez, que ya es un clásico de esta representación navideña. «Hace dos años le dediqué el belén cuando todavía era novillero y ahora vuelve a aparecer en la plaza del pueblo pero ya como matador de toros», ha explicado Tomás Gómez.
La presencia de vacas, ovejas, cerdos, gallinas y pastores, homenajea las labores de los ganaderos en el municipio en una representación en la que también tiene cabida la matanza, la apicultura y la pesca, y en la que el autor hace también un guiño especial a la caza.
En cuanto a la agricultura, son muchas las escenas que homenajean este modo de vida y sustento, tan importante en San Esteban de la Sierra: viñas, olivares, plantaciones de arándanos, la trilla, la recogida de leña, huertos caseros o la recogida de la aceituna.
Los establecimientos del pueblo también forman parte de esta peculiar escena navideña, que incorpora la almazara, las bodegas, los locales de hostelería e incluso la venta ambulante. También se le da protagonismo en esta nueva edición del belén a la Ruta de los Lagares Rupestres y al “chozo bóveda”, antiguo refugio de pastores y agricultores.
En cuanto a las construcciones y edificaciones, y como explica Tomás Gómez, «tanto el Ayuntamiento como la ermita son réplicas de las de San Esteban de la Sierra elaboradas con piedra y madera autóctonas, mientras que el resto, aunque están inspiradas en el pueblo, están hechas un poco a mi estilo”. Por otra parte, las figuras son mayoritariamente compradas “aunque casi todas las tuneo y las pongo a mi manera».
Como curiosidades del belén serrano, también cuenta con un fragmento del ‘supuesto’ meteorito encontrado hace unos años en el pueblo y con tres cigüeñas que rinden tributo a los últimos niños nacidos en San Esteban, ya que los más pequeños tienen un gran protagonismo e incluso son los que dan la bienvenida al nacimiento junto a una representación de las fuentes del pueblo.
Aunque natural de Frades de la Sierra, Tomás Gómez lleva dos años viviendo en San Esteban, a donde se trasladó desde Béjar, que fue testigo del comienzo de esta iniciativa. «Empecé con mi hijo en casa porque me gusta la marquetería y la pintura y poco a poco fuimos añadiendo figuras hasta que ya no nos cabía. Me invitaron a hacerlo en Béjar e incluso llegué a realizarlo en Frades de la Sierra pero mucho más pequeño, hasta que Antonio Labrador me invitó a ponerlo en San Esteban de donde ya he decidido que no se mueve».
Muchos vecinos colaboran económicamente para que el belén pueda seguir creciendo, e incluso aportan algunas piezas como las veletas o la rosa de los vientos que forman parte de la representación.
En esta nueva edición Tomás ha dedicado 120 horas a la instalación, ya que la ubicación de cada figura la va decidiendo sobre la marcha inspirándose en una fotografía de gran formato de la cuarta edición del belén.
Por su parte, el alcalde de San Esteban, Antonio Labrador, ha animado al centenar de vecinos que han acudido a la inauguración a «hablar y contar a todas las personas que conozcáis que se acerquen a visitarlo y a disfrutarlo como un reclamo turístico más de nuestro pueblo que tiene un valor enorme y que nos ha convertido en una de las referencias navideñas de la Sierra de Francia».
El objetivo de esta Navidad en San Esteban de la Sierra es superar la cifra récord de 1.500 visitas al belén serrano que se registraron el año pasado. El nacimiento permanecerá abierto al público hasta el 6 de enero en horario de 16:30 a 19:30 horas los días laborables; y de 12:00 a 14:00 horas y de 17:00 a 19:00 horas los sábados, domingos y festivos.
