El Fondo de Cohesión Territorial 2025, impulsado por la Junta de Castilla y León en colaboración con la Diputación y los ayuntamientos, repartirá un total de 2.616.808,70 euros entre los municipios de la provincia con menos de 1.000 habitantes para financiar inversiones en infraestructuras y equipamientos municipales básicos.
Estas ayudas, cuyas bases se llevarán mañana al pleno de la Diputación para su aprobación, tiene como finalidad garantizar los servicios mínimos y obligatorios en los pueblos más pequeños de la provincia: “Esta es una herramienta fundamental que pretende igualar las oportunidades de los territorios, ya que los más pequeños suelen tener más dificultades para cubrir sus necesidades”, explicó el presidente de la Diputación.
En cuanto a la financiación de esta iniciativa, esta se distribuye en un 50% que aporta la Junta de Castilla y León, mientras que el 25% lo aporta la Diputación de Salamanca y el 25% restante está a cargo de los propios ayuntamientos. «Un buen ejemplo de colaboración entre administraciones que da resultados tangibles y mejora la vida de los vecinos del medio rural”, señaló el presidente provincial.
“Cada euro invertido en los pueblos es una apuesta por el futuro de nuestra provincia y por la igualdad de oportunidades entre quienes viven en el campo y quienes viven en la ciudad y esta es una buena manera de luchar contra la despoblación”. En concreto, las ayudas permitirán a los ayuntamientos llevar a cabo obras de mejora en servicios básicos, como pavimentaciones, abastecimiento, saneamiento, alumbrado o instalaciones municipales, que contribuyen a mantener en buen estado los equipamientos locales y a fortalecer el bienestar de los vecinos.
El diputado de Empleo y Desarrollo Rural, Antonio Labrador, ha puesto el foco en las bases y condiciones de este Fondo. En cuanto a las solicitudes, explicó que estas se podrán presentar por los ayuntamientos en sede electrónica en un plazo de 15 días hábiles desde la publicación de la convocatoria en el Boletín Oficial de la Provincia. Las actuaciones subvencionables, por su parte, serán las realizadas entre el 1 de enero de 2025 y el próximo 31 de diciembre de 2026: “Esto quiere decir que se podrán financiar obras que ya se hayan llevado a cabo, o, por el contrario, no hayan comenzado”, explicó Labrador. Así, con esta nueva edición del Fondo, la Diputación de Salamanca pretende reafirmar su voluntad de seguir apoyando a los municipios más pequeños, asegurando que «ningún pueblo, por pequeño que sea, quede atrás».
 
			 
                                

 
							


