El alcalde lamenta el aumento de actos vandálicos durante este verano: “No son simples travesuras, estamos ante comportamientos graves”
Monterrubio de Armuña ha vivido un verano marcado por la preocupación. Lo que en años anteriores se limitaba a ruidos nocturnos o pequeñas molestias, este 2025 ha derivado en un problema. Esto se debe a los reiterados actos vandálicos cometidos por grupos de adolescentes de entre 13 y 16 años, por lo que el Ayuntamiento lanzó hace unas semanas, a finales del mes de agosto, un llamamiento público para evitar estas situaciones.

“Estamos viviendo una situación cada vez más preocupante en nuestro municipio”, advertía el Ayuntamiento, que detallaba “conductas inaceptables” como golpes a puertas y fachadas, lanzamiento de piedras, daños en vehículos, mobiliario urbano roto y la incursión en huertos y espacios comunitarios, por lo que “no se trata de simples travesuras: estamos ante comportamientos graves”.
El alcalde, David Matute, reconoce que, aunque cada verano suelen registrarse quejas por ruidos, este año la situación ha ido más allá. “No sólo son quejas por el ruido, sino también queman timbres, tiran piedras a ventanas, a coches y dañan la vía pública. Esta situación está siendo una constante este verano”, señaló.
Además, explica que en muchos casos los jóvenes se encaran con los vecinos, lo que genera habitualmente situaciones de tensión. “Desde el Ayuntamiento buscamos, a través de distintos llamamientos, que las familias conozcan estas actitudes y tomen cartas en el asunto”, insiste Matute. Tal y como apunta el regidor, la intención no es sancionar de forma directa, sino intentar que, mediante las figuras paternas, se entienda la molestia y la situación cambie.
En cambio, la respuesta institucional no se ha hecho esperar. El Consistorio ya ha trasladado la situación a la Guardia Civil, solicitando el aumento de la vigilancia, que se ha reforzado también mediante cámaras en instalaciones municipales como las piscinas, el pabellón y el gimnasio, donde además se ha implantado un sistema de acceso mediante una tarjeta, para que solamente puedan entrar los socios.
“Estamos estudiando la modificación de la ordenanza de civismo para ver la posibilidad de endurecer las penas por este tipo de actos”, ha adelantado el alcalde, que además anuncia la puesta en marcha de cursos y charlas de formación y concienciación dirigidas tanto a jóvenes como a familias.
En conclusión, el mensaje municipal es claro: “No hablamos de juegos. Hablamos de vandalismo. De altercados que pueden acabar en enfrentamientos, daños materiales serios e incluso en accidentes con consecuencias irreversibles”. Por eso, el Ayuntamiento apela a la responsabilidad de las familias y de toda la ciudadanía para cortar una dinámica que amenaza con deteriorar la convivencia en esta localidad salmantina.