Más de 200 vecinos de Castellanos de Moriscos se han reunido hoy para mostrar su devoción al Santísimo Cristo de las Batallas en la previa de sus fiestas.
La ermita del Humilladero se ha quedado pequeña para acoger a los fieles, muchos de los cuales han esperado fuera hasta que ha finalizado la oración y alabanzas al Cristo.
Una vez fuera de la ermita, y con las velas encendidas, ha comenzado la procesión de las antorchas precedida por la imagen del patrón y seguida por los numerosos vecinos y peñas con sus banderas, que al finalizar el recorrido han dejado colgadas para mostrar sus respetos al Cristo.
Entre cánticos y rezos, el desfile ha recorrido los 1.300 metros de distancia que separan la ermita de la iglesia de San Esteban, situada en el centro del municipio, donde ha tenido lugar el rezo de las vísperas, donde permanecerá el Cristo para presidir las celebraciones religiosas de las fiestas en su honor que comenzarán el próximo miércoles día 6.