Es la tercera legislatura en la que está al frente del Ayuntamiento de Villamayor, uno de los municipios más pujantes en el alfoz de Salamanca y mantiene la misma ilusión e incluso más ganas por seguir trabajando por su pueblo y sus vecinos, para mejorar los servicios y dotaciones que consigan incrementar la calidad de vida y el crecimiento del municipio.
–¿En qué está inmersa la actividad municipal del equipo de Gobierno en estos momentos?
-El órgano político no para, siempre mantiene una línea de continuidad y desde el día que llegamos se tiene muy claro cuál es el objetivo final. No hacemos una visión a corto plazo, porque eso te mantendría con el rumbo cambiado a cada paso. Nosotros tenemos muy claro cuál es el objetivo final de Villamayor, puesto que fijamos la vista a 25-30 años.
Ahora, sí que estamos inmersos en aspectos importantes y muy determinantes para la consecución de ese futuro Villamayor, porque es verdad que parece que ya va a ver la luz el tema del equipamiento deportivo de ‘El Salinar’ y la conexión de la expropiación del camino peatonal y ciclista de Gudino de unión del casco urbano con la zona de Vega de Salamanca.
Todo eso está en línea continuista. Es verdad que, como dice el refrán las cosas de palacio van despacio, y al final, para que se vea materializada una cosa, la administración es muy lenta y todo es muy farragoso de informes y expedientes, pero está.
-El crecimiento de Villamayor pasa por el desarrollo de los nuevos sectores urbanísticos previstos en torno a la circunvalación que desvíe el tráfico de la travesía. ¿En qué punto están estos proyectos?
-Queremos continuar con el desarrollo residencial e industrial que va a generar la circunvalación de Villamayor en el ensanche de la nueva zona residencial. Estamos pendientes de reunirnos con el consejero para ver la cofinanciación de la circunvalación de Villamayor y poder minorar el coste de repercusión a esos sectores y una vez que tengamos ese acuerdo con la Junta de Castilla y León, intentar que la travesía ya formara parte de lo que es una vía interna del municipio y tener un crecimiento demográfico importante.
A su vez, eso ya va ligado a una propuesta de un sector industrial en la zona norte, entre la estación de servicio enfrente de la subestación eléctrica y la circunvalación de Salamanca en la SA-300, que creemos que es un punto estratégico para desarrollar suelo de estas características.
Con lo cual, ya estaríamos hablando de poner la semillita de cara a un Villamayor del 2050, asentado y con una población importante y cubrir los servicios que demandamos. Ahora estamos en vías de ir atendiendo a las partes más locales de nuestra área. Para ello, ya se ha licitado la mejora de accesibilidad y cambio de tuberías y redes en la zona sur con la renovación de las calles de la parte de arriba del pueblo a través de Planes Provinciales y con el Fondo de Cohesión de la Junta y dejar esta zona totalmente renovada. También estamos mejorando la accesibilidad en la travesía en el acceso norte, en la entrada al pueblo por la parte de Ledesma.
Intentamos no dejar nada en el olvido y el ciudadano ve el esfuerzo que le pedimos en la aumento del IBI, que va directamente repercutido a esas mejoras locales de sus calles que hacen que se revaloricen sus viviendas. Intentamos ser honestos en ese trabajo y no dejar a ningún barrio y a ninguna urbanización sin la consabida mejora.
-¿Confía en que el proyecto de la circunvalación podría quedar iniciado antes de que termine esta legislatura?
-Antes de que termine la legislatura me gustaría que se iniciara el proyecto, pero a mí con ver antes de finalizar esta legislatura la posibilidad de que se pudiera estar trabajando en la circunvalación y licitado algún tramo, sería un éxito. Porque nosotros hace más de un año modificamos el régimen de esos sectores para darles más altura y provocar mejores unidades residenciales y más atractivas, no solo al constructor sino también al residente, con más capacidad de diseño y espacio libre que es por donde va la arquitectura hoy. Hemos puesto todo en el asador para que confluyan todos los intereses y se pueda materializar.
-La gratuidad prometida por la Junta en el transporte público ¿permitirá al Ayuntamiento reducir el coste del servicio para seguir invirtiendo en estas mejoras?
-Las últimas noticias de la Junta con la gratuidad en los bonos del transporte metropolitano, si se materializa, nos va a permitir destinar dinero bien a alguna reducción de presión fiscal o bien a alguna intervención a mayores.
Con lo cual, el equipo de Gobierno tiene claro desde el día que tomó posesión lo que quiere hacer y lo que estamos persiguiendo es eso: Mejorar a Villamayor, seguir haciendo que sea un pueblo demandado y con interés para la población de toda la provincia de Salamanca y seguir creciendo en la medida que necesitamos.
Solicitamos la mejora en la financiación local, porque ya estamos tomando una envergadura importante y necesitamos mejoras y creo que estamos dando los pasos acertados. Al final, es verdad, que hay cuestiones que se nos pueden criticar, pero a grandes rasgos lo que nos pueden pedir es esa claridad de miras, esa facilidad de salir a la hora de salir y explicar las cosas y que nos tienen siempre a mano cuando surge un problema e intentamos resolverlo en la franja más inmediata de tiempo.
-¿La ampliación del Camino de Gudino se hará realidad en breve?
-Llevaremos al pleno extraordinario la modificación de crédito para hacer frente al pago de las expropiaciones y pagar la ocupación e iniciar las obras. Lo más inmediato sería echar una zahorra y que la gente que viene caminando por ahí tenga la garantía de que es un espacio seguro al tránsito y luego ya buscar la financiación para el resto del coste de la infraestructura.
-¿Sigue siendo uno de los objetivos del equipo de Gobierno crear el gran corredor verde desde la zona deportiva hasta el Prado Boyal?
-Sí, pero nos hemos encontrado problemas y ahora queremos volver a retomar las conversaciones con la gente que ostenta el aprovechamiento del prado y ver s quieren llegar a algún tipo de acuerdo, porque si no, pasaría por iniciar un expediente de expropiación y poder tener la titularidad de ese suelo. Estaremos abiertos a la mejor situación para el Ayuntamiento, pero tenemos claro que ese suelo tiene que ser finalmente un espacio lúdico en el que puedan convivir los intereses de quienes tienen el aprovechamiento y los de los vecinos de Villamayor. No cejaremos en buscar cuáles serán las mejores alternativas, pero han de entender que si no tenemos una vía clara, lo más sencillo es ir a la expropiación y pagar lo que estime el Tribunal Económico.
–¿Qué servicio o servicios le faltarían a Villamayor para conseguir dar ese impulso al desarrollo del municipio?
Es una cuestión de servicios terciarios, los que corresponde a dar cobertura al ámbito municipal están cubiertos. Al final, la gente lo que pide es tener una gran superficie y no tener que desplazarse. Hay interés pero parece que no acaba de cuajar. Hay una buena red de hostelería, nos gustaría tener algún restaurante y eso al final hace más pueblo, más convivencia y todo ayuda a tener un pueblo más unido y más tejido.
Ya tenemos las mimbres y en el momento que haya más demanda por parte de los vecinos según vayamos adquiriendo ese crecimiento.
–Villamayor es Ciudad de los Niños y cuenta con una amplia cobertura de iniciativas y actividades para ellos, pero los niños de ayer ya son adolescentes y jóvenes, ¿qué políticas se plantea llevar a cabo el Ayuntamiento para este colectivo que ya es muy amplio en el municipio?
-Tenemos que ver cuáles son los próximos datos de análisis de natalidad, porque ya no estamos en el volumen del baby boom de los 2000, a día de hoy se ha reducido la tasa de natalidad casi a la mitad. Se ha pasado de más de 100 a unos 50-60 al año y si se mantienen esos datos o se va reduciendo eso nos hace pensar cuál es el futuro más inmediato.
En estos momentos, tenemos dos colegios con 3 líneas los dos y en un futuro a lo mejor con dos líneas en uno de los centros si siguen estos datos sería suficiente. Hacer inversiones para la creación de centros juveniles cuando a lo mejor nos encontramos a la vista de que en cinco o seis años tenemos solamente dos líneas de Educación igual un colegio se nos queda vacío y hacer una inversión de muchos miles de euros y sin uso, estaríamos equivocados. Frenamos el proyecto que tenemos aprobado porque meternos en una inversión de 4 millones de euros, si a la vuelta de 4-5 años hay que reconvertir uno de los centros, no estaría bien desde el punto de vista político malgastar el dinero público pudiendo reutilizar o acondicionar un edificio que ya está.
No obstante, estamos viendo en qué medida podemos ofrecerles servicios y actividades para los jóvenes, cómo ampliarles el horario de la Biblioteca u ofrecerles un espacio propio en la sala para facilitarles el estudio.
-Pasando ya a hablar de las fiestas, enlazar las actividades de la Semana Cultural como preámbulo a las fiestas ha sido un acierto
-Yo creo que sí es un éxito. Debemos remontarnos al año pasado cuando se hizo el cambio de la estructura y se tuvo la visión de modificar la parte de las fiestas llevando el pregón una semana antes separando la parte más institucional de la parte lúdica. Este año hemos ampliado más introduciendo la Semana Cultural y a mí me parece que es un acierto.
Es verdad que el fin de semana pasado, no sé si porque la gente tenía ganas de salir por el cambio de climatología, hubo mogollón en los distintos actos. Ya el pregón fue un éxito, porque David de la Mano cautivó al público con sus palabras y sus recuerdos de infancia y con la discoteca joven y el sábado con el correfoc y el tributo la Plaza tenía un ambiente de pre fiesta. El domingo, con el cross de Aspace volvemos a superar el número de inscritos, así que todo perfecto y acompañando el tiempo, creo que todo se hace mejor.
A final de la Semana Cultural, las actividades siguen siendo un éxito de participación. Creo que le va dando esa cobertura que precisa, que la gente sin estar descargando todos los días hasta tarde, sí va notando esa concentración de actividades durante estos días. Porque si se concentra toda la fiesta en sí en un fin de semana, es muy intenso, pero te saben a poco, se quedan cortas. Así que muy contento con esta nueva estructura.
–¿Qué destacaría del grueso del programa festivo que está por llegar?
-Es difícil destacar solo alguna cosa. Yo creo que el programa que ha establecido Lucía, la concejala de Fiestas y el resto de compañeros, la verdad es que está muy bien organizado porque no te da tiempo a que haya un respiro y se atienden a todas las franjas de edad.
¿Qué destacaría? Si lo centramos en el aspecto religioso, la procesión y la ofrenda del ramo es lo más emblemático, pero luego está la parte lúdica nocturna de las verbenas, la parte de convivencia en torno a la comida, la interpeñas y la del lunes, y si nos centramos en las actividades de los chavales, los teatros, el humor amarillo….
Yo creo que hay mucho, variado y bueno, lo único que falta es que salgamos, camisetas de peñas en las calles y convivencia, porque el tiempo nos va a acompañar.