Los representantes de la plataforma Cuidamos Villamayor han asegurado que su preocupación es mayor tras la reunión mantenida con el director general de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, José Manuel Jiménez, y el jefe del Servicio de Prevención Medioambiental, Jaime Fernández.
Un encuentro en el que expusieron su preocupación añadida sobre la situación del proyecto de la futura planta de biogás que se pretende instalar en Doñinos y que se suma a los problemas que ya viven por los olores de la fábrica de grasas en la zona de Doñinos. «Consideramos que no se ha tenido en cuenta el desarrollo de una legislación y planificación que sirva para regular la instalación de este tipo de industrias y se nos ha remitido únicamente a la Ley de Prevención y Control Integrada Ambiental de la Contaminación, puesto que según sentencia del TSJCYL no es de aplicación en esta autonomía el Reglamento de Actividades Molestas Insalubres Nocivas y Peligrosas, de ámbito nacional».
Lamentan que desde la Junta de Castilla y León insistan en que «solo tramitan procedimientos administrativos según la norma, que consiste en elaborar un breve informe para determinar si hay alguna deficiencia técnica, en cuyo caso se le requiere al promotor para su subsanación. Ante lo que consideramos una deficiente elaboración de los proyectos publicados en el BOCyL, somos nosotros los ciudadanos quienes nos vemos obligados a realizar el análisis pormenorizado de todos los estudios básicos que presentan los promotores mediante las correspondientes alegaciones». Alegaciones en las que ya están trabajando y que presentarán medio millar de reclamaciones para intentar parar que esta planta sea una realidad.
Desde la plataforma también se muestran reticentes sobre la respuesta a la petición de «mayores garantías financieras ante posibles incidentes graves que afectaran al entorno, como las normativas de residuos y de responsabilidad medioambiental, a lo que se nos contestó que estas normas se pondrían en práctica una vez finalizada la construcción de estas plantas». No obstante, el director general aseguró «que no se van a permitir aquellas instalaciones situadas a menos de 700 metros de zonas habitadas, como es el caso de la planta de Doñinos», pero desde Cuidamos Villamayor «consideramos que también se debe tener en cuenta el estudio de otros factores como la dirección predominante de los vientos».
