Más de doscientos vecinos de Villamayor se han reunido en la Plaza de España para expresar sus protestas y presentar la Plataforma Cuidamos Villamayor con la que seguir denunciando los insoportables olores que sufren como consecuencia de la actividad de la fábrica de grasas ubicada junto al puente Gudino.
Con esta concentración ciudadana, la plataforma ha anunciado su intención de continuar luchando y defendiendo los intereses de los vecinos hasta que se eliminen por completo los olores provocados por la actividad industrial de la que actualmente es propietaria en un 65% el fondo de inversión Magnun Capital.
Los vecinos han manifestado a través del portavoz de la plataforma, Ruperto Sánchez, su deseo de paralizar y cerrar la instalación hasta que se acabe con el problemas de los malos olores y también han reclamado ayudas y soluciones a la Junta de Castilla y León «que debe asumir responsabilidades ya que es la institución competente».
Desde la Plataforma Cuidamos Villamayor, que está formada por unas 27 personas de diferentes sectores, han anunciado que continuarán con las protestas, las concentraciones y la presión social hasta que se solucione el problema, invitando a unirse, a través de su perfil en Facebook, a todas las personas que quieran colaborar.
Por último, también ha pedido dureza y contundencia a los dos ayuntamientos más afectados, al de Villamayor «para que sigamos trabajando de la mano» y al de Doñinos «que ha sido el que ha concedido la licencia de actividad».
En este sentido, el alcalde del municipio, Ángel Peralvo, que ha participado en la concentración junto al resto del equipo de Gobierno y concejales de otros grupos municipales, ha señalado que El Ayuntamiento «está con los vecinos como no puede ser de otra manera y, como es lógico, el Ayuntamiento también está por la labor de cuidar Villamayor y desde hace un tiempo estamos trabajando de forma continua con ellos para ver las líneas que hay que trasladar a la Administración competente, que es la Junta de Castilla y León».
Peralvo ha destacado y agradecido el trabajo de los técnicos del Ayuntamiento, «porque continuamente están haciendo la labor de control y traslado de los problemas de los episodios tan recurrentes que hemos tenido en estos meses y están dando sus frutos».
En este momento, «el eco es mayor porque el problema ha derivado a todos los municipios limítrofes y porque la capital se ha hecho con el mismo problema y es más patente». Algo que desde el Consistorio de Villamayor ya se había avisado a la Subdelegación del Gobierno, a la Diputación y a los ayuntamientos de Salamanca y Doñinos «de que era un problema común y ha llegado y se ha visto que es así, porque ahora los episodios más graves se han dado en la capital. Todos tenemos que remar en la misma dirección y buscar una solución».
El Ayuntamiento de Villamayor también ha mantenido reuniones con los responsables actuales de la empresa y les ha dejado claro que «no vamos a cesar, que vamos a proseguir, ya sea de forma amigable o belicosa, buscando las alternativas que sean necesarias». Encuentros en los que desde la fábrica, como ha reconocido el primer edil, se ha trasladado la política de inversión prevista en el rediseño de las instalaciones «en una inversión elevada a medio o largo plazo y dejando en el aire que con el tiempo corregirían todo, pero es mucho tiempo y es muy horroroso lo que llevamos vivido y la gente tiene un hartazgo que lo que quiere son soluciones inmediatas, no esperar hasta febrero que es el plazo que al parecer le ha dado la Junta de Castilla y León».
Por ello, «todos entendemos que la problemática puntual que se pueda dar es asumible, pero no esto que estamos sufriendo, ni el nivel de frecuencia ni de intensidad. Buenas palabras tenemos todos, pero tienen que venir los hechos», ha concluido el alcalde.