El calor no ha desanimado a los vecinos de Doñinos, que siguen con ganas de fiesta y esta tarde se han reunido en la calle Cervero para asistir al descenso de los Autos Locos.
En esta edición, seis intrépidos se han lanzado con sus originales vehículos desafiando la inclinación de la calle y confiando en llegar a la meta. Finalmente, todos han logrado frenar a tiempo y completar el recorrido.
Las peñas, jóvenes y vecinos han animado a los participantes, entre los que han desfilado el autobús de Barrio Sésamo, la tribu india, la bañera sobre ruedas, una bicicleta transformada en cohete y otras dos originales especie de bicis a ras del suelo que han logrado superar la prueba.
Gritos de ánimo, risas y aplausos que han seguido compartiendo después de los Autos Locos con la tradicional invitación del Ayuntamiento al municipio para refrescarse de las altas temperaturas. En total, 1.000 litros de cerveza, 200 de cerveza sin alcohol y 500 de tinto de verano, además de agua y refrescos para los pequeños han servido para hidratar el cuerpo y seguir divirtiéndose y compartiendo las fiestas.