El Grupo Popular de Carrascal de Barregas ha informado del descontento que existe entre los vecinos por el cierre de la guardería anunciado por el Consistorio para la semana del 19 de agosto. Una medida que el gobierno de la alcaldesa, Noelia Merino, justifica en un comunicado publicado en la redes sociales municipales por las obras que se realizarán en el espacio infantil y que todo apunta a que dejará a una veintena de familias sin posibilidad de conciliación por un servicio que han pagado y que se ha avisado con apenas diez días de antelación.
Los populares califican esta situación como «una muestra más de la poca previsión y de la falta de interés por los asuntos que preocupan a los vecinos de la localidad, a los que no se escucha ni atiende, como es la conciliación de la vida familiar y laboral en un mes como el de agosto que puede acarrear serios problemas a las familias del municipio que utilizan este servicio».
Además acusan al PSOE de no dar la cara ya que «es la empresa gestora de la Guardería Municipal la que está informando a los padres de la situación mientras que es equipo de Gobierno se mantiene, una vez más, escondido y sin trabajar en posibles alternativas para facilitar el traslado a otras dependencias municipales que cuenten con espacio dignos, seguros y acondicionados durante este periodo que la instalación infantil estará cerrada por obras».
Desde el Grupo Popular llevan varios meses denunciando la dejación de funciones del equipo de Gobierno «que 14 meses después mantiene cerrado un edificio multiusos con cientos y cientos de metros disponibles por su incapacidad y falta de trabajo, que sería una alternativa sencilla para trasladar el servicio durante la semana que permanecerá cerrada la guardería». Su portavoz, Antonio Luis Rodríguez, ha comentado que «lejos de buscar soluciones solamente han dado la posibilidad de trasladar el mobiliario a otros espacios municipales sin aclarar cuáles y sin confirmar que estos espacios cuenten con los requisitos necesarios e imprescindibles para acoger a niños con edades comprendidas entre los 0 y 3 años como puede ser una correcta climatización para evitar las altas temperaturas».
Una actitud que ha sido calificada como «de soberbia y dictatorial por parte de la alcaldesa y de su equipo de Gobierno, que en vez de ayudar y dar soluciones castiga de nuevo a los vecinos y a los usuarios de un servicio muy bien valorado y con una alta demanda por no se sabe muy bien qué intereses».