Las reiteradas denuncias y reclamaciones vecinales, unidas a la solicitud realizada por el Ayuntamiento de Villamayor de forma insistente desde hace un año, han hecho que finalmente la Junta inicie la revisión de la autorización ambiental de la fábrica de grasas situada en la zona próxima a Gudino, y aunque pertenece al término municipal de Doñinos, son los vecinos de Villamayor los que sufren los problemas de los desagradables olores que emiten de forma periódica dichas instalaciones.
Un trabajo conjunto llevado a cabo entre el Ayuntamiento y la asociación de vecinos de Gudino y que, ahora y tras haber detectado problemas graves y deficiencias en las revisiones, se ha logrado que la Junta retome este asunto que los vecinos llevan denunciando y luchando contra esta situación de contaminación ambiental desde 2009.
Una vez concluido el plazo el pasado 12 de abril para que la empresa presentara toda la documentación correspondiente, la Consejería de Medio Ambiente deberá estudiarla y analizarla para comprobar el cumplimiento. Si tras examinar los documentos, la empresa no cumple con los requisitos y medidas exigidos, tendrá que cerrar y cesar su actividad y solicitar una nueva autorización ambiental atendiendo a la normativa actual y ajustándose a todas las exigencias establecidas para poder seguir en funcionamiento.
El Ayuntamiento pondrá en conocimiento de la empresa la información recibida con la cronología de las solicitudes, informes y respuestas de las consultas realizadas con el objetivo de conseguir que ponga los medios para poder desarrollar su actividad, siempre que no sea nociva para los vecinos de Villamayor.