La Agencia de Protección Civil y Emergencias ha alertado de la llegada para hoy y mañana de precipitaciones de lluvia abundantes y persistentes en el centro y este de Castilla y León, especialmente intensas en el Sistema Central, donde podrán acumularse 30 mm en una hora. Los fenómenos tormentosos podrán ir acompañados de granizo y fuertes rachas de viento, en torno a 70-80 km/h. Dichas precipitaciones se irán desplazando de este a oeste a lo largo del día y en la primera mitad de la jornada del lunes.
La alerta se mantendrá declarada hasta las 22:00 horas del lunes 4 de septiembre, aunque podría prolongarse en función de la evolución de las predicciones meteorológicas.
Recomendaciones a la población
Como consecuencia de ello, la Agencia de Protección Civil y Emergencias proporciona una serie de recomendaciones a la población para prevenir posibles emergencias derivadas de estos fenómenos meteorológicos
Para prevenir accidentes a causa del viento, conviene asegurar o, si es posible, incluso retirar de ventanas, terrazas o tejados aquellos objetos que sean susceptible de caer a la vía pública, como pueden ser tiestos, macetas, toldos, sillas, antenas… En caso de desplazarse a pie por la calle, es recomendable alejarse de andamios o de vallas publicitarias.
Si vamos a circular por carretera, es necesario sujetar con fuerza el volante al realizar adelantamientos o a la entrada y salida de los túneles, así como permanecer atentos a las posibles balsas de agua que se formen en la calzada para evitar el efecto “aquaplanning”. En general, se aconseja reducir la velocidad de circulación e incrementar la distancia de seguridad entre vehículos. Por otro lado, se recomienda realizar la operación retorno lo antes posible con el fin de evitar perjuicios.
Se desaconseja, en estas próximas horas, la práctica de actividades al aire libre, en especial en zonas cercanas a ríos, arroyos o barrancos, por la posibilidad de producirse crecidas súbitas de los cursos de agua. Si nos sorprende una tormenta al aire libre, conviene ponerse a cubierto, lejos de árboles, antenas o postes, pues cabe la posibilidad de que caigan rayos sobre ellos. Además, hay que evitar circular por pasos subterráneos y túneles, y si nos vemos sorprendidos por una crecida, tratar de buscar refugio en las zonas más elevadas del lugar en el que nos encontremos.