La Diputación de Salamanca ha aprobado esta mañana inicialmente el presupuesto para el año 2023 con el voto favorable de los 7 diputados del Grupo Popular, los votos en contra del PSOE y Cs y la abstención del diputado no adscrito.
Este último, José Francisco Bautista, ha definido los últimos 27 años de Gobierno del Grupo Popular como «faltos de ideas y que cuesta pensar que haya podido ser tan rentable políticamente». Despoblación carreteras e infraestructuras con nulo mantenimiento y difícil acceso a las nuevas tecnologías algunos de los ejemplos que ha recordado y «sin ideas, sin proyectos de futuro que generen ilusión y sin que los fondos lleguen a los municipios que debe ser el objetivo de la Diputación».
Por parte del Grupo Cs, su portavoz, Manuel Hernández, ha calificado los presupuestos como «continuistas, que en ningún caso llegan a la población y que por lo tanto no se plasman en un aumento del bienestar de los ciudadanos de la provincia de Salamanca». Un presupuesto que para el año 2023 contará con 12 millones más que en el último aprobado, pero que en palabras de Hernández: «No se notará porque no llegará a los municipios y a los vecinos de la provincia de Salamanca».
El socialista Fernando Rubio ha calificado las cuentas debatidas para 2023 como «más de lo mismo», con unos presupuestos que «no son útiles para la provincia y los ciudadanos cada vez tienen más la sensación de que el dinero que entra en la Diputación no llega a los municipios». Unas cuentas «continuistas sin idea, que se han convertido en una operación contable pero que no sirven para solucionar los problemas de los municipios de la provincia y se han convertido en caprichosos, clientelista y arbitrarios».
El portavoz del Grupo Popular, Antonio Luis Sánchez, ha criticado la falta de trabajo de los grupos de la oposición, ya que «no han presentado ninguna propuesta sólida para ser analizada, para ser debatida y para poder ser incluida en los presupuestos del próximo año». Unos presupuestos que en palabras del diputado de Hacienda «están pensados para los municipios, para las personas y para el desarrollo de la provincia». Sánchez ha recordado que «los municipios recibirán de estas cuentas 40 millones de euros, lo que supone un incremento del 17% con respecto al último año, y que un 30% del presupuesto va directamente a los municipios».
El pleno también se aprobó por unanimidad un importe de 6,3 millones de euros para las ayudas energéticas a los ayuntamientos de la provincia, así como el Plan de Apoyo Municipal para 2023 por un cantidad total de 10,8 millones con las dos líneas habituales, por un lado para las inversiones y por otro lado para la contratación de personal.