El Ministerio del Interior y la Universidad de Salamanca ha firmado en la Casa Museo Unamuno el acto por el que el centro de formación de la Policía, con sede en Ávila, se incorpora a la USAL con rango de centro adscrito. El rector, Ricardo Rivero, y el director general de la Policía, Francisco Pardo, han rubricado el acuerdo, en presencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y del resto de autoridades, entre las que se encontraban los alcaldes de Salamanca y Ávila.
Con una vigencia de cuatro años, el convenio firmado culmina el proceso por el que el centro de formación que el ministerio tiene en Ávila, la Escuela Nacional de Policía, se integre en la estructura de la Universidad de Salamanca, lo que permite que los estudios del grado en Estudios Policiales y el máster en Seguridad y Función Policial adquieran rango universitario. En concreto, el grado en Estudios Policiales, que comenzará a impartirse en el mes de octubre en Ávila ofrecerá formación universitaria a 400 oficiales de la Policía Nacional.
En su intervención, el rector de la Universidad de Salamanca ha incidido en «la correlación demostrada en todas las democracias avanzadas entre la formación de los cuerpos y fuerzas de seguridad y la reducción en el uso de la fuerza para la resolución de conflictos», y ha agradecido el trabajo de la comunidad universitaria de Ávila, la Facultad de Derecho y los vicerrectorados de Calidad y Enseñanzas de Grado y Postgrado y Enseñanzas Propias en el desarrollo de los trabajos que concluyen con este convenio. También ha querido el rector hacer un agradecimiento expreso a la Junta de Castilla y León por incorporar estos nuevos estudios al catálogo de titulaciones de la comunidad autónoma.
Por su parte, el ministro Grande-Marlaska ha señalado en su intervención «el compromiso institucional del Ministerio del Interior y de la Universidad de Salamanca para el desarrollo de actividades académicas conjuntas. Este acuerdo permitirá a nuestros agentes adecuar su respuesta a los nuevos modos de operar de las amenazas tradicionales, como la delincuencia organizada o el terrorismo, y generar respuestas eficaces a los nuevos retos que nos plantea la seguridad pública, como aquellos vinculados al cambio climático, a la transformación digital y a las nuevas formas delictivas», ha señalado.
La relación entre la Universidad de Salamanca y el Ministerio del Interior para la formación del personal de la Policía Nacional se remonta a 1989, cuando ambas organizaciones acordaron el primer convenio que regulaba la participación del profesorado de la USAL en la formación que ofrecía el centro abulense. Desde entonces, decenas de miles de funcionarios y funcionarias de la Policía han completado su proceso de enseñanza de acuerdo a este modelo, que ahora se refuerza a través de la conversión de la escuela en un cetro universitario adscrito.