Jornada festiva sin descanso, con la concentración de vehículos clásicos, la comida interpeñas y la ofrenda del ramo de los Quintos como atractivos principales

Han arrancado con fuerza y ganas y tras el multitudinario pregón de Los Pichones, llegó el turno de la estrella de las verbenas de este año. La orquesta París de Noia reunió anoche en el recinto ferial a más de 10.000 personas que disfrutaron de la actuación con ganas, en un espacio seguro y con un férreo control de acceso.

Los fuegos artificiales pusieron la guinda al estreno festivo y dieron paso a la jornada de hoy sábado, que ha estado repleta de actividades para todos.

El buen ambiente se respira en las calles y rincones de Villamayor. Así, desde primera hora la participación vecinal ha sido numerosa en las distintas propuestas festivas.

El mercado medieval con la decena de puestos de productos artesanos de alimentación, embutidos, bisutería, cerámica y mimbre y la exhibición de cetrería han acaparado la atención de niños, mayores y familias al completo que han conocido un poco más al halcón peregrino, las lechuzas y águila de pluma roja, entre otras aves rapaces y han comprobado la importancia de un buen adiestramiento.

Novedad a la que se ha unido la concentración de vehículos clásicos, coches y motos, que ha sido un deleite para los amantes del motor. Un centenar de vehículos de distintas épocas han estado expuestos durante la mañana en la avenida Diego Velázquez y los participantes, además de lucir sus piezas, han recibido una placa para lucir en los vehículos y un ticket para disfrutar de una consumición gratuita en los bares.

Aunque la participación ha sido masiva a todas las propuestas, hay dos actividades tradicionales  que destacan en el ecuador de las fiestas: la comida Inter Peñas y la ofrenda del ramo de los Quintos a la Virgen de los Remedios.

Más de 2.000 personas se han concentrado a mediodía en la carpa para disfrutar de una completa parrillada. Unos 2.000 kilos de chorizos, panceta, costilla y cabecero de lomo. Viandas que han compartido las peñas, los vecinos y grupos de jóvenes para reponer fuerzas y seguir disfrutando de las fiestas.

Por la tarde, la expectación llegó un año más con la entrega del ramo que los Quintos ofrecen a la Virgen. Tras la romería, los jóvenes han vuelto con un mayo de más de 9 metros de largo que ocasionó algún problema para pasarlo al interior de la iglesia, donde las mujeres y Quintos preparaban las cintas bordadas con los nombres de los chavales, las naranjas y los limones que ofrecen a la Virgen colgados del árbol.

Con esfuerzo y sobre todo mucha pericia, los miembros de las peñas Los Pichones, Los Trompas y Los Berracos lograron subir y poner en pie el gran ramo que roza con el techo del templo y que poco a poco fueron decorando y poniendo los frutos y ofrendas a la Patrona, símbolos de las alegrías y las penas de todo un año y que recuerdan las frutas típicas de esta temporada.

Finalmente y bajo la atenta mirada de los jóvenes quintos y los fieles que no han querido perderse esta tradición, el ramo ha quedado preparado para la celebración religiosa de mañana ante la Virgen, que ya luce su manto blanco bordado para el día de su fiesta.

La discoteca móvil infantil y la música de la charanga, junto a la final de fútbol sala de Casjuvi que ha ganado el equipo Jarrones, seguidos de Adicktos y CalleTrece ha completado el podium, han dado paso a la verbena nocturna, que hoy estará a cargo de la Orquesta La Huella.

 

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