El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández, ha recordado en su visita a Salamanca para clausurar el I Congreso Internacional de Vacuno, que la Comunidad es una potencia agroalimentaria y la carne es la que más contribuye. Una de cada cuatro empresas agroalimentarias de la autonomía es una empresa cárnica y por este motivo ha garantizado el apoyo de la institución regional como la puesta en marcha de campañas para destacar la calidad de sus productos o de medidas fiscales con beneficios especiales para el medio rural, que supondrán un ahorro superior a los 15 millones anuales y que beneficiarán a más de 275.000 personas.
Más deducciones por natalidad, rebaja en transmisiones de negocios y de explotaciones agrarias prioritarias y bonificación en arrendamientos rústicos, ha destacado el presidente de la Junta, quien ha anunciado una bonificación al cien por cien de las licencias de caza y pesca, frente al 95 % comprometido, y la ampliación de la validez de uno a cinco años.
«Tasa cero y menos trámites este mismo año para todas las licencias de caza y pesca, que generan actividad económica en nuestro mundo rural», ha resaltado Fernández Mañueco. También ha informado de que se está trabajando en un Plan de Control de las enfermedades más importantes y una actualización de la normativa aplicable, donde siempre se tendrán en cuenta los intereses de los ganaderos.
Así pues, ha explicado que se va a procurar un pacto estable y equilibrado de los distintos agentes de la cadena alimentaria, con especial atención a los agricultores y ganaderos; y se mantendrá el apoyo económico, con 10 millones de euros en ayudas directas dentro del plan anticrisis o un aumento de fondos que permitirá al sector agrario solicitar préstamos para circulante por 58 millones de euros.
La comunidad con más vacuno
Estas medidas son especialmente relevantes en Castilla y León, que es la comunidad de España con más vacuno, y, dentro de ella, Salamanca es la provincia más destacada. Por lo tanto, el valor del vacuno es muy importante: valor económico, con cerca del 20 % de la producción ganadera, 581 millones de euros; valor social, porque genera empleo y fija población en el medio rural; y valor medioambiental, ya que contribuye a ecosistemas insustituibles, como la dehesa, y aporta toda la diversidad genética de la cabaña bovina.