El alcalde de Salamanca, Carlos García, y el director general de Iberaval, Pedro Pisonero, han firmado hoy la renovación del convenio de colaboración puesto en marcha en el año 2020 para facilitar liquidez a las empresas locales, en especial a las más afectadas por la crisis derivada de la pandemia de Covid-19, como son el comercio, la hostelería y las academias de enseñanza del español.
El Ayuntamiento de Salamanca aumenta hasta 6.000 euros el máximo de bonificación, con un mínimo de 400 euros, para aquellos proyectos empresariales puestos en marcha en la ciudad con financiación avalada por la sociedad de garantía. El Consistorio bonificará los gastos financieros de las operaciones que se planteen por un importe total que no que podrá superar los 750.000 euros por préstamo o crédito referido a las necesidades de inversión y/o circulante, o que mejoren sus condiciones mediante novaciones, a devolver en un periodo máximo de 15 años, con la posibilidad de dos años de carencia.
A mayores, este año se ha incluido otra novedad en el convenio: en operaciones de avales directos, aunque no implique financiación, se facilita a las pymes y autónomos garantizar obligaciones ante terceros.
Para todo ello, el Ayuntamiento reserva una partida presupuestaria municipal de 75.000 euros, ampliables a 100.000 en caso de que, como se espera, haya demanda para estas ayudas. Con ese importe, se espera inducir una inversión global de 4,8 millones de euros, a partir de esa mejora en las condiciones de acceso al crédito por parte de pymes, autónomos y emprendedores.
Para acceder a la bonificación, los interesados pueden dirigirse al Área de Promoción Económica del Ayuntamiento de Salamanca, ubicada en la Plaza Mayor 15, o a la propia sociedad de garantía Iberaval, en la calle Crespo Rascón 39-41.
García Carbayo recordó que, desde el inicio de la pandemia, el Ayuntamiento siempre ha estado al lado de las pymes y autónomos para facilitarles el mantenimiento de su actividad económica en los momentos más duros, y posteriormente ayudarles a recuperar la generación de actividad y empleo una vez superadas las restricciones sanitarias, pues «son una parte fundamental en el tejido productivo de Salamanca». Así, en 2021 se concedieron ayudas por un importe total cercano a 1,7 millones de euros para bonificación de intereses, transformación digital, relanzamiento, hostelería y EPIs.
Por su parte, Pedro Pisonero destacó el compromiso que ha demostrado el Consistorio salmantino con las empresas en los dos últimos años y ha puesto en valor el trabajo encabezado por su alcalde y el Área de Promoción Económica. De esta forma, considera que iniciativas como ésta van a ayudar a las empresas salmantinas a superar una crisis como la actual que, «no obstante no tiene similitud con respecto a la que aconteció en los años posteriores a 2007».