El Ayuntamiento de Salamanca continúa presentando las mejoras que se están realizando en los diferentes parques y plazas de la ciudad, como en el barrio de la Prosperidad. En esta zona de Salamanca se han acondicionado tres plazas, ubicadas entre las calles Tomás San Martín y Domingo de Betanzos, en Conde Duque de Olivares y Garcilaso de la Vega, y entre Núñez de Zamora y Padre Suárez, dentro de los trabajos de mejora ofertados por la empresa adjudicataria del servicio municipal de parques y jardines.
La concejala de Medio Ambiente, Parques y Jardines, Miryam Rodríguez, ha comentado que se ha transformado una zona en proceso de degradación y con escasa presencia de zonas verdes en un espacio de mayor valor ornamental y medioambiental. Al mismo tiempo, se contribuye a reducir el efecto isla de calor que se produce en zonas excesivamente pavimentadas en entornos urbanos, propiciando así beneficios para salud de los salmantinos. Un total de 2.700 metros cuadrados con escasa presencia vegetal aumentando la masa arbórea y arbustiva gracias a la plantación de 7 unidades de magnolias, 36 de arbustiva de alto porte con photinia y thuja, y 330 metros cuadrados de arbustiva baja y plantas aromáticas y vivaces de vistosa floración. Se trata de especies aromáticas y con vistosa floración, favoreciendo el aumento de la biodiversidad y su contribución a crear un espacio más saludable y disfrutable por las familias. A ello contribuye también la incorporación a las superficies resultantes de una capa de astillado, creando un acolchado que permite el mejor aprovechamiento del agua. Al mismo tiempo, la zona se ha dotado de una red de riego automatizado para garantizar el necesario aporte hídrico a las especies plantadas y su correcto desarrollo.
Proyecto ‘Alcorques savios‘
Durante la visita a las renovadas plazas interiores de Prosperidad, Miryam Rodríguez estuvo acompañada por miembros de la Asociación Insolamis que participan en el proyecto ‘Alcorques savios’. En la plaza de Tomás San Martín llevan a cabo el cuidado de 10 alcorques que han sido plantados por este colectivo que promueve la promoción y formación integral de las personas con discapacidad intelectual. Se trata de una iniciativa de participación ciudadana para fomentar la biodiversidad en los barrios, de manera que los vecinos también puedan contribuir en el crecimiento del patrimonio verde de su ciudad, contribuyendo así a construir una ciudad más saludable y a la vanguardia de la lucha contra el cambio climático gracias a la introducción de la naturaleza en el entorno urbano.
Tras las primeras experiencias con la asociación de vecinos de Huerta Otea, la Fundación AFIM, la Fundación Aviva, Insolamis, Down Salamanca y Salud Mental Salamanca AFEMC en los barrios de San Isidro, Prosperidad, Puente Ladrillo y Zurguén, respectivamente, hoy es el turno para el Colegio Marista y la asociación de vecinos ZOES.
El cuidado de los alcorques favorece la presencia de fauna auxiliar útil para el control biológico de plagas del arbolado o simplemente en su cuidado, a la vez que se potencia la calidad del suelo y aumenta la biodiversidad en la ciudad. Al mismo tiempo, mejora la estética de las calles, pues aportar alternativas más sostenibles para la gestión de los alcorques permite actuar sobre estos espacios utilizados generalmente como papeleras, pipican o simplemente espacios residuales.
Participación en ‘Alcorques savios‘
Los interesados en participar pueden realizar la solicitud a través del siguiente enlace en la página web municipal: https://www.aytosalamanca.gob.es/es/tramitesgestiones/tramite_0253
Una vez recibida esta documentación, técnicos municipales de Medio Ambiente, de acuerdo a una guía que sirve de marco organizativo a tal efecto, estudian las calles y los correspondientes alcorques donde podrá efectuarse la plantación y cuidado en las épocas más adecuadas para ello. La asignación de los alcorques comportará la firma de una declaración responsable por la parte interesada, comprometiéndose a respetar la guía así como las ordenanzas municipales aplicables a tal efecto durante un año, que podrá ser renovable por periodos anuales de manera automática.
Técnicos municipales de Medio Ambiente también establecerán las especies concretas a emplear para garantizar su viabilidad y diversidad, que tendrán un alto valor ornamental con presencia de flores, colores o texturas, serán especies de alta rusticidad que necesiten bajos cuidados y poca exigencia de agua, plantas vivaces que perduren de un año a otro y especies que no presenten características molestas o peligrosas (espinas, hojas o frutos venenosos…).