Dos cerdos de 190 y 150 kilos han sido los protagonistas de la fiesta típica de la matanza que se ha realizado en Castellanos con motivo de las fiestas de San Blas. Mucha expectación en la segunda jornada festiva para conocer cómo se llevan a cabo las tareas tradicionales de chamuscado y despiece, así como la posterior preparación de las carnes para la elaboración del embutido. Una vez finalizados todos los trabajos los asistentes han podido disfrutar de la degustación popular de patatas meneás. Esta actividad tendrá continuidad mañana domingo, una vez que finalice la misa, con la cata de las probaduras del cerdo acompañadas de huevos fritos y la posterior degustación de chanfaina.