Regalar con imaginación y tendiendo exclusivamente a los gustos y la edad de los niños es el objetivo de la campaña para comprar juguetes inclusivos y no sexistas que UNAF (Unión de Asociaciones Familiares) pone en marcha teniendo en cuenta el aumento de adquisición de regalos en esta época navideña.
‘#Ni jugueto Ni jugueta’ es la campaña que UNAF ha presentado en la mañana de este jueves con el apoyo de la Diputación. La presidenta de la agrupación, Ascensión Iglesias, junto a la directora, Amaya Echevarría, y el diputado de Cultura, David Mingo, han destacado «la importancia de elegir un juguete atendiendo solo a las preferencias de los pequeños y lo que deseen en este momento para terminar con los estereotipos de género»
Dejar a un lado las diferencias entre el rosa y el azul, las muñecas y los coches o juegos de acción o científicos, en función de si se es niña o niño y romper con estos estereotipos para no limitar la libertad de juego de los más pequeños es el mensaje que UNAF, en la que están incluidas 21 asociaciones que desde 1988 trabajan en la diversidad familiar desde diferentes ámbitos, lanza a las familias para concienciarlas, fundamentalmente a los padres, de la importancia de evitar estas diferencias de opciones de juego por cuestión de género.
La rebelión de los juguetes llega a través de la campaña ‘Ni jugueto Ni jugueta’, ya que la exclusión de niños y niñas con los juegos es clave para su desarrollo social, «lo que aprendemos en la infancia nos acompañará toda la vida», ha asegurado la presidenta de UNAF. «Los niños perciben lo que ven en su familia, por eso hay que intentar cambiarlo, ya que estas diferencias suponen un enorme impacto en el desarrollo y posterior comportamiento del niño», ha insistido Iglesias.
En este sentido, han reconocido la influencia de la publicidad, «porque del 100% de los anuncio dirigidos a niños y padres tienen un patrón estereotipado. En más del 47% de los protagonizados por niñas juegan con muñecas, mientras que en el 45% de los que protagonizan los niños, lo hacen con coches o figuras de acción, además de la preocupación por la exclusión de las niñas en los juegos del ámbito científico o tecnológico». Por ello, han recalcado las responsables de UNAF que la campaña «tendrá continuidad porque hay que seguir educando a la sociedad en general, ya que la publicidad de juguetes refuerza la segregación profesional por sexos».
Esta campaña, compuesta por un vídeo, una web y diversos materiales gráficos para redes sociales ha sido posible gracias a la subvención del Ministerio de Derechos Sociales y la Agenda 2030.