El Consistorio de Santa Marta ha resuelto y adjudicado los 12.000 euros destinados a sufragar la nueva convocatoria de ayudas de cooperación al desarrollo que en esta ocasión han recaído en siete asociaciones y entidades sin ánimo de lucro que trabajan en proyectos sociales en los países más empobrecidos.
Proyectos con temáticas como protección a la pandemia, tareas educativas, medioambientales o de apoyo a la infancia son los contendidos que desarrollarán las asociaciones en estos siete países.
Por orden de puntuación han resultado beneficiadas por esta subvención municipal en primer lugar Amycos, por su proyecto de abastecimiento de agua en Bolivia; en segundo lugar AMAP, por la creación de una cooperativa dirigida a mujeres dedicadas al campo en El Congo; en tercer lugar Unicef por su proyecto de protección a los niños sirios contra la pandemia; en cuarto lugar Delwende al servicio de la vida, por la construcción de dos salones de clases en un colegio de Venezuela; en quinto lugar a la asociación Ayudemos a un niño, por su apoyo a 20 centros escolares de Nicaragua ante la situación de emergencia provocada por el Covid; en sexto lugar la asociación Rimal Sahara Tormes, por su ayuda a los campamentos de población saharaui refugiada en Argelia y por último, la Fundación Agua de Coco, por su proyecto de estancias educativas ambientales en un centro de Magadascar.
Los representantes de las asociaciones que han resultado beneficiadas por la subvención acudieron al Ayuntamiento de Santa Marta al acto oficial de recogida de la dotación económica en el que además pudieron agradecer personalmente a la concejala de Bienestar Social, Mari Cruz Gacho, la implicación del Consistorio santamartino con proyectos sociales que se materializan más allá de su fronteras.
“Para nosotros todos los proyectos son igual de importantes y nos supone un gran esfuerzo dedicar una partida a estos proyectos. De cualquier forma, estamos muy contentos porque vamos a llegar a distintos puntos del planeta ayudando con la cobertura de distintos proyectos muy diferentes entre sí pero muy necesarios. Proyectos de asistencia social, educativos, de suministro de recursos básicos… en definitiva, poner nuestro granito de arena para mejorar el mundo”, señaló la edil.
Para acceder a esta subvención los proyectos debían cumplir una serie de requisitos como estar cofinanciados con otros recursos diferentes a los aportados por el Ayuntamiento, así como ser viables por sí mismos y que sus repercusiones prosigan una vez que se acabe la ayuda económica. También es requisito indispensable que el proyecto se realice a través de un socio local del país que recibe la ayuda y con la participación de los destinatarios últimos de la dotación económica.