Los vecinos de la zona de Gudino y Vega de Salamanca en Villamayor han decidido actuar para poner fin al problema derivado de los malos olores que desprende de forma continuada la fábrica de grasas ubicada junto al puente de Gudino. Un proceso que retoman después de años de reivindicaciones, con el apoyo de los ayuntamientos de Villamayor y Doñinos, y que ahora confían en dar solución para vivir tranquilos.
Aunque la empresa está ubicada en el término municipal de Doñinos, los principales afectados son los vecinos de estas urbanizaciones de Villamayor por la cercanía con sus viviendas. Un problema que llevan padeciendo ya más de una década, como lo demuestran las primeras manifestaciones vecinales que se llevaron a cabo en 2009 denunciando esta situación que 13 años después se mantiene y limita la calidad de vida de estos vecinos.
Por este motivo, y con el objetivo de llegar a una solución definitiva, la Asociación de Vecinos de Vega de Salamanca ha contratado a un técnico/perito que ha elaborado un informe sobre la empresa y su actividad, «tras el análisis llevado a cabo de las emisiones de gases, lo que debería tener y el grado de cumplimiento de licencias y los sistemas que debe tener para evitar estas filtraciones a la atmósfera».
El informe técnico con la documentación y la parte normativa de los parámetros que la empresa tiene que cumplir así como los aspectos técnicos es lo que la agrupación vecinal entregará en el Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León «para reclamar que se compruebe si se están cumpliendo los parámetros y requisitos que en su día le pidió la Junta», porque según el documento técnico «la empresa tiene la tecnología suficiente para paliar estos defectos, por lo que puede ser un mal uso o fallos de funcionamiento».
En este sentido, y con el objetivo de contar con el apoyo y la colaboración institucional, representantes de los ayuntamientos de Villamayor y Doñinos, además del Parque Científico, han asistido a la reunión convocada por la Asociación de Vecinos Vega de Salamanca para trasladarles las conclusiones de este estudio y llegar al desenlace que permita a los vecinos abrir las ventanas, salir a pasear y respirar aire puro.
Los responsables municipales han valorado positivamente este paso dado por la asociación, siempre desde «la vía del diálogo y la colaboración» y han mostrado su «apoyo total para conseguir vivir tranquilos y que no haya ese olor nauseabundo en el ambiente». «Hay que conseguir que se pueda erradicar el grave problema que se da con el tema de los olores, porque llega hasta muy lejos, más allá del casco urbano».
Los ayuntamientos irán de la mano de la asociación vecinal para que, una vez que se tengan los resultados de la Junta tras hacer la valoración de este informe, «se solicite el cumplimiento a la empresa». «Estamos a su disposición porque el paso que han dado es muy importante y si a partir de aquí se entiende que es la Administración local la que debe seguir el procedimiento, daremos traslado de la situación», han señalado los responsables municipales.