Tras cinco intensos días sobre las ruedas de sus ciclomotores clásicos refrigerados por aire y con una antigüedad de más de 25 años, la veintena de participantes en el II Raid Solidario Proyecto Hombre han completado su recorrido por la provincia.
Un periplo en el que han superado el medio millar de kilómetros (523) para adentrarse en los pueblos y sus gentes y poner en valor el mundo rural para visibilizar el esfuerzo y la lucha por evitar la España vaciada, paralelos con el trabajo que hay que realizar con las personas que tienen algún tipo de adicción, como asegura el presidente de Proyecto Hombre, Manuel Muíños. Para que los sentimientos de tristeza, soledad y miedo que acechan a los pueblos y a sus gentes, al igual que a los adictos, no les lleven a abandonar sus vidas.
Por ello, este viaje solidario y de amistad, en el que el compañerismo entre los participantes es parte fundamental de la experiencia y que ha concluido este mediodía, tras la última parada por Carbajosa de la Sagrada, con el paso de los moteros por el arco de meta junto a la Plaza Poeta Iglesias.