Las niñas del programa ‘Ciudad Amiga de la Infancia’ (CAI) de Santa Marta han participado esta tarde en un taller de sensibilización medioambiental sobre reciclaje. Una actividad organizada con motivo del Día de la Basuraleza, que se celebra mañana.
La presidenta de la Cooperativa de Economía Social, Porsiete, Pilar Rodríguez, ha sido la encargada de impartir el taller de reciclaje a los pequeños, que han atendido las explicaciones y la importancia de separar los residuos en casa. Así, además de cartón, plásticos y vidrio, Rodríguez ha mostrado a los niños el sistema de reciclaje de aceite doméstico usado y el tratamiento que se le da en su empresa. Un residuo muy dañino por los problemas que puede ocasionar si se echa directamente a las tuberías y para lo que Porsiete facilita unos embudos para su fácil recogida, depositándolo en una botella y después tirarlo a los contenedores específicos de color naranja. Un reciclaje que Santa Marta fue pionera en ponerlo en marcha en 2008 a través del convenio firmado con Porsiete y que actualmente mantiene en su apuesta por potenciar la separación de residuos desde el origen.
La edil de Infancia, Esther Casado, también ha participado en esta actividad, «porque creemos que es fundamental que los niños desde pequeños estén concienciados con la importancia que tiene el reciclaje en nuestro planeta, que aprendan cómo hacerlo para que sea útil y a su vez sean capaces de crear conciencia entre los más mayores, que muchas veces no están tan acostumbrados a reciclar, pero lo empiezan a hacer cuando sus hijos les piden que lo hagan”.
La amenaza de tormenta y lluvia ha impedido completar la jornada medioambiental con la salida prevista a la Isla del Soto para la recogida de basura tirada fuera de las papeleras y por los caminos y concienciar a los viandantes sobre la necesidad de reciclar. En este sentido, Casado ha señalado: “Aunque no hemos podido hacer el recorrido para recoger basura, es importante incidir, aunque sea de forma teórica, en la concienciación del impacto que genera el abandono de basura en los entornos naturales, además de poner en valor la importancia de las tres erres: reducir, reutilizar y reciclar entre la población; y apostar por un modelo de producción y consumo más sostenible son, algo a lo que colaboraremos, aunque sea a pequeña escala, con esta recogida colaborativa de basuraleza”.
Las niñas han demostrado su preocupación por el cuidado del medio ambiente, han preguntado y solventado sus dudas acerca del reciclaje de distintos residuos y la utilidad o segunda vida que tienen algunos productos, además de llevarse un embudo a casa para reciclar el aceite usado.