El Ayuntamiento inicia los trámites con las administraciones competentes, Junta y DGT, para poder actuar y controlar el volumen de tráfico que la SA-300 soporta a diario a su paso por el municipio.
Villamayor de Armuña ha iniciado los primeros contactos para la instalación de radares en la travesía del municipio con los que establecer medidas de control de velocidad que permitan dar mayor fluidez al tráfico en la carretera SA-300.
Una vía que soporta el paso de gran cantidad de vehículos a diario, por lo que los responsables municipales quieren también establecer un mayor control, aunque la carretera ya cuenta con semáforos y pasos de peatones en distintos tramos para evitar el exceso de velocidad, dado que se trata de la única vía de acceso al municipio por la que tienen que atravesar todos los vehículos con dirección a la zona oeste de la provincia y que cuenta con una extensión de 2,8 kilómetros de distancia.
Por ello, desde el Consistorio han iniciado los contactos con las administraciones competentes para pedir las autorizaciones necesarias para poder actuar y evitar las duplicidades de competencias, ya que la vía es de titularidad de la Junta, pero la parte sancionadora que conlleva la instalación y puesta en marcha de los cinemómetros depende de la Dirección General de Tráfico.
El problema de excesivo tráfico que soporta la SA-300 a su paso por Villamayor es una de las preocupaciones históricas de los distintos equipos de Gobierno que han pasado por el Ayuntamiento, por lo que llevan más de una década reivindicando la construcción de una variante de la carretera por fuera del término municipal y que ya está contemplada en el PGOU.